Volamos hacia Madrid. La circulación de los aviones en el aire se rige por un estricto sistema que coordina cada uno de los movimientos de las distintas aeronaves. A medida que nos acercamos a Madrid este sistema se pone a prueba al entrar en contacto con el numeroso tráfico aéreo del aeropuerto de Barajas.

Extractos de una conversación mantenida con Carlos Márquez, piloto de vuelos comerciales.

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PILOTO: "Madrid buenos días Ribera 451 abandonando pista 33 izquierda".
CONTROLADOR:" Ribera 451 buenos días ruede por ALPHA al 95 en JULIET ceda paso a un 737 de Congolia y espere señalero en ECHO".

Una vez que el avión ha aterrizado en la pista, se inicia el rodaje hasta el lugar donde debe quedar el avión estacionado: "Es la fase del vuelo en la que más atento hay que estar y creo que la que menos gusta a un piloto". Se mezcla la circulación de aviones rodando con la de los vehículos de transporte de maletas, combustible o tripulación. "Se trata de una fase similar a la del tráfico rodado en una ciudad como Madrid, aunque Barajas es un sitio puntual que tiene un tráfico muy intenso a escala internacional. En las pistas, existen carriles y señalizaciones como en las carreteras".